El ruido es uno de los principales factores que afectan la calidad de vida y el bienestar de las personas. El exceso de ruido puede provocar estrés, irritabilidad, insomnio y problemas de salud. Por eso, es importante contar con un buen aislamiento acústico en las paredes de nuestra vivienda, especialmente si vivimos en zonas urbanas o cerca de fuentes de ruido como carreteras, obras o vecinos ruidosos.
El aislamiento acústico consiste en impedir o reducir la transmisión del sonido entre dos ambientes separados por una barrera física, como una pared. Para lograr un buen aislamiento acústico, se pueden utilizar diferentes materiales que tienen la capacidad de absorber, reflejar o amortiguar el sonido.
Tipos de materiales de insonorización de paredes
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Estos materiales se pueden clasificar en dos tipos: los absorbentes y los reflectantes. Los materiales absorbentes son aquellos que tienen una estructura porosa o fibrosa que atrapa las ondas sonoras y las disipa en forma de calor. Estos materiales se suelen colocar en el interior de las paredes o entre ellas, formando una cámara de aire. Algunos ejemplos de materiales absorbentes son la lana de roca, la lana de vidrio, el poliéster o el corcho.
Los materiales reflectantes son aquellos que tienen una superficie lisa y dura que rebota las ondas sonoras. Estos materiales se suelen colocar en el exterior de las paredes o sobre ellas, formando una capa protectora. Algunos ejemplos de materiales reflectantes son el yeso, el pladur, el metal o la madera.
¿Qué material elegir para aislar acústicamente las paredes?
La elección del material más adecuado para aislar acústicamente las paredes dependerá de varios factores, como el tipo y la intensidad del ruido, el espesor y la composición de la pared, el espacio disponible, el presupuesto y el diseño estético. No obstante, se pueden establecer algunas pautas generales para orientarnos:
- Si queremos aislar un ruido aéreo, como el de la música, las voces o el tráfico, lo más recomendable es usar un material absorbente que reduzca la reverberación y la transmisión del sonido. Además, se puede combinar con un material reflectante que aumente la masa y la rigidez de la pared.
- Si queremos aislar un ruido de impacto, como el de los golpes, los pasos o los muebles, lo más recomendable es usar un material amortiguador que disminuya la vibración y la propagación del sonido. Además, se puede combinar con un material absorbente que atenúe el ruido residual.
- Si queremos aislar ambos tipos de ruido, lo más recomendable es usar una combinación de materiales absorbentes, reflectantes y amortiguadores que ofrezcan una protección integral contra el ruido.
¿Qué ventajas tiene cada material para aislar acústicamente las paredes?
A continuación, vamos a ver algunas ventajas e inconvenientes de los materiales más utilizados para aislar acústicamente las paredes:
- La lana de roca es un material ecológico que se elabora a partir de papel reciclado y cartón, con la adición de hidróxido de aluminio. Es uno de los mejores aislantes acústicos, ya que tiene una alta capacidad de absorción y amortiguación del sonido. Además, es resistente al fuego, a la humedad y a los agentes biológicos. Su principal inconveniente es que puede resultar irritante para la piel y las vías respiratorias al manipularlo.
- La lana de vidrio es un material natural que se fabrica a partir de arena y vidrio reciclado. Es un excelente aislante térmico y acústico, ya que tiene una baja conductividad térmica y una alta porosidad. Además, es ligero, flexible e incombustible. Su principal inconveniente es que puede liberar partículas que pueden ser inhaladas o provocar alergias.
- El poliéster es un material sintético que se obtiene a partir del petróleo. Es un aislante acústico muy eficaz, especialmente a bajas frecuencias, ya que tiene una gran porosidad y absorción del sonido. Además, es impermeable, autoextinguible y no genera olores ni se apelmaza. Su principal inconveniente es que tiene un alto costo energético y ambiental en su producción.
- El corcho es un material natural que se extrae de la corteza del alcornoque. Es un aislante térmico y acústico muy versátil, ya que se puede presentar en diferentes formatos, como planchas, rollos o granulados. Además, es ecológico, renovable y biodegradable. Su principal inconveniente es que tiene una baja resistencia mecánica y puede ser atacado por insectos o hongos.
- El yeso es un material mineral que se obtiene de la calcinación de la piedra de aljez. Es un aislante acústico moderado, ya que tiene una buena reflexión del sonido, pero una baja absorción. Además, es económico, fácil de instalar y permite un acabado liso y uniforme. Su principal inconveniente es que es frágil, pesado y puede agrietarse o desmoronarse con el tiempo.
- El pladur es un material compuesto por dos láminas de cartón y un núcleo de yeso. Es un aislante acústico aceptable, ya que tiene una buena reflexión del sonido, pero una baja absorción. Además, es ligero, resistente y permite crear diferentes formas y diseños. Su principal inconveniente es que es más caro que el yeso y puede ser perforado o dañado con facilidad.
- El metal es un material artificial que se obtiene a partir de la fundición de minerales metálicos. Es un aislante acústico deficiente, ya que tiene una alta reflexión del sonido, pero una baja absorción. Además, es duradero, impermeable y ofrece una gran variedad de acabados y colores. Su principal inconveniente es que es pesado, caro y puede oxidarse o corroerse con el tiempo.
- La madera es un material natural que se obtiene del tallo de los árboles. Es un aislante acústico variable, ya que depende de su densidad, grosor y tratamiento. Además, es estético, cálido y confortable. Su principal inconveniente es que es inflamable, higroscópico y puede ser atacado por insectos o hongos.
¿Cómo instalar los materiales para aislar acústicamente las paredes?
La instalación de los materiales para aislar acústicamente las paredes dependerá del tipo de material elegido y del sistema constructivo empleado. No obstante, se pueden seguir algunos pasos generales para garantizar una correcta instalación:
- Lo primero es medir la superficie de la pared a aislar y calcular la cantidad de material necesario.
- Lo segundo es limpiar la superficie de la pared y eliminar cualquier elemento que pueda interferir con la instalación, como clavos, tornillos o enchufes.
- Lo tercero es fijar el material aislante a la pared mediante el método adecuado, que puede ser adhesivo, mecánico o mixto. Se debe asegurar que el material quede bien ajustado y sin huecos ni fisuras.
- Lo cuarto es colocar una capa de protección sobre el material aislante para mejorar su rendimiento y su durabilidad. Esta capa puede ser una placa de yeso, pladur, metal o madera, según el diseño deseado.
- Lo quinto es sellar las juntas entre las placas de protección con masilla o cinta adhesiva para evitar fugas o filtraciones de sonido.
- Lo sexto es aplicar el acabado final sobre las placas de protección para darle el aspecto estético deseado. Este acabado puede ser pintura, papel tapiz o revestimiento.
